El 108 es un número sagrado dentro de muchas culturas y disciplinas y así es en el Yoga. 108 son las cuentas de un mala, se dice que aproximadamente la distancia entre la Tierra y el Sol es 108 veces el diámetro del Sol y la distancia entre la Tierra y la Luna, 108 veces el diámetro de esta última. El 1 simboliza la unicidad, en no- dualismo, Dios. El 0 simboliza el vacío y el 8 el infinito, la eternidad. 

El ritual de los 108 saludos al sol es una poderosa práctica que hacemos coincidiendo con los equinoccios y solsticios, momentos de cambio en la naturaleza que nos sirven para conectar con esa energía y renovar y focalizar nuestra intención. 

La repetición sin pausa de los 108 saludos nos lleva a un estado meditativo en el que sólo existe nuestra respiración. Nuestra mente se aquieta y la luz de la consciencia comienza a brillar con su luz propia. 

Es una práctica renovadora, llena de fuego purificador, de tapas, superación y perseverancia. Una práctica mágica, íntima y con una fuerza difícil de explicar. 

Como ya es tradición, cada cambio de estación nos unimos en el centro de Yoga Samsara para unir respiraciones y darle la bienvenida a un cambio de ciclo más.

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